vida que desperdicio,
vida que no comparto,
vida en excedente que me ahoga y no trasmito.
El egoismo y el pensamiento único me mantienen en la ignoracia,
en el egocentrismo,
no me dejan experimentar los resultados
de volcarme en los otros con un sentimiento,
con un pensamiento,
con una acción o con una palabra.
Sin darme cuenta que me pierdo la más sublime
de las emociones que un hombre puede sentir: vivir y ayudar a vivir.
Continuo negando mi libertad y la de los otros;
ahogandome en mi propia vida
sin ser consciente de que la felicidad
solo puede ser entendida como la realización del bien,
y que al bien solo se llega por el amor sin medida a los demás.
La vida solo toma sentido cuando nos sitúa frente al otro.
Así, vivir sería la magia de llegar a los demás
en un tiempo determinado que llamamos vida.
Si ademas llegamos a ellos con amor,
el regalo que recibimos a cambio es la felicidad.
Y a todos se nos da gratis llegar a los demás,
todos podemos ayudar a vivir a otros,
todos tenemos la capacidad de influir en alguna medida en sus vidas
regalando amor a conocidos y a extraños.
Descubrirlo y practicarlo nos libera y nos da vida.
El amor dignifica al ser humano,
abre la puerta de la esperanza hacia un futuro mejor,
hace fluir las bondades del hombre en la corriente a favor de la vida.
La vida evoluciona hacia su plenitud cuando es valorada en el amor.
El mensaje debe ser vivir,
promover vida,
transmitir vida,
ayudar a vivir.
Amar un poco mejor cada día
va regalandome espacio dentro de mi,
me libera de esa vida que me ahoga
y me ayuda a acoger nueva vida.
Vivir y ayudar a vivir,
eso significa amar y ser amado.
Amar libera mi corazón de amor
y deja sitio nuevo para volver a amar y ser amada.
Vivir es amar.
y amar no es dar,
es darse en vida,
es entregarse sin reservas.
La vida solo la viven aquellos que estan dispuestos a darla,
a darla por Amor. Porque Vivir es darse por Amor.
"He venido para que todos tengan Vida
y para que la tengan en abundancia"